Parece que el Levante
no se desinfla, y Arouna Koné no se cansa de meter goles. Hoy el equipo granota
ha vuelto a ganar (3-1 al Granada) y se ha colocado en puestos de Champions
League a expensas de lo que hagan mañana en el Málaga – Valencia.
El costa marfileño
lleva 17 goles esta temporada, si mete uno más renovará automáticamente con el
Sevilla, si no lo hace, permanecerá en Valencia.
El delantero está
siendo clave en el equipo, no sólo en los goles, sino en el juego. Viéndolo en
el campo recuerda a aquel jugador que maravilló en el PSV y que hizo que el
Sevilla se fijase en él. Está claro que Koné es fundamental y el jugador dice
que quiere seguir en Valencia (Dijo no a la Copa de África por seguir ayudando al equipo).
Y la cuestión es,
¿merece la pena seguir alineando a Koné en los tres partidos que quedan? Por
una parte sí, porque sin Koné este equipo pierde mucho y si de verdad quieren
tener opciones para entrar en Champions League el de Costa de Marfil es
necesario.
Por otro lado, no.
Parece descabellado no alinear a tu mejor jugador, pero si Koné no llega a la
cifra de los 18 goles, permanecerá en Valencia. Y Koné el año que viene será
muy necesario ya que el Levante no se sabe por qué luchará y, para competición
europea sería imprescindible.
Imaginaos la
situación: Último partido de liga, si el Levante gana se mete en Champions,
últimos minutos de partido, Koné recorta al portero y se queda sólo con la
portería vacía… ¿La metería? ¿Ustedes la meterían?
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